miércoles, 9 de enero de 2019

¿POR QUÉ NO JUGAMOS?: Emötiö de Marta Miguel y Judith Ballester

¡HOLA A TODOS Y A TODAS! ¡FELIZ MIÉRCOLES!

                                                                                                                                                          
Hoy iniciamos una nueva etapa en el blog. Sí, era uno de nuestros objetivos para este nuevo año y aquí está. No sé si lo habremos comentado alguna vez, pero somos muy fans de los juegos de mesa. Nos parecen un recurso excelente para pasar divertidos ratos con la familia y los amigos y bueno, nosotros tenemos algún que otro que nos gustaría ir compartiendo, así que ¡¡¡VAMOS CON EL PRIMERO!!!




 EMÖTIÖ




Nuestro primer juego no puede ser otro que Emötiö. ¿Por qué? Durante estas fiestas os hemos hablado bastante de él por Instagram, pero no es para menos. Ya sabéis durante mis prácticas estoy trabajando con niños con NEE y hemos podido probar este juego en las sesiones y nos ha gustado mucho. ¡Es genial!

Desde que comenzamos la carrera comenzó a llamarnos la atención el tema de la educación emocional. Eso sí, después de mucho investigar somos muy exigentes en lo relativo al tema emociones. Ya os habréis dado cuenta de que constantemente sale al mercado nuevos libros y materiales, y a pesar de que nos alegra que hoy en día se le de importancia a la educación emocional, también nos entristece que hay cosas que se sacan por sacar, por subirse al carro de lo que vende, y por ello la calidad deja mucho que desear. Por eso, cuando nos topamos con Emötiö no nos pudo gustar más. 

 DATOS BÁSICOS

  • Editorial: autoeditado
  • Edad: + de 4 años 
  • Cantidad de jugadores: + 2 jugadores


 ¿QUÉ CONTIENE EL JUEGO? 

  • 40 cartas de emociones: Encontramos 40 emociones distintas en unas cartas cuidadosamente ilustradas. Nos gustó mucho que fueran representadas por un niño y una niña. Tal y como nos comentó Marta, su intención no era otra que cuidar mucho los estereotipos de género, lo que nos pareció un punto totalmente a su favor. En muchas de estas situaciones, podemos ver también la situación que ha desencadenado esa emoción. Además, están en tres idiomas: castellano, catalán e inglés. ¡Otro punto positivo! Tengo a un par de jugadores obsesionados con el inglés y toda su intención es aprenderlas en este idioma. ¿No es genial que se cuiden estos aspecto? Las cartas son muy bonitas y no están sobrecargadas. La parte trasera tiene el logo del juego sobre un fondo blanco. 

  • Dado de juego: Una cucada. Es de madera y con seis caras grabadas con seis símbolos diferentes. Nos dará lugar a realizar distintas acciones: contar una historia, empatizar, representar emociones, etc. 

  • Manual y guía de emociones: Es pequeñito, pero muy completo. Nos explica el juego de manera sencilla y nos explica su idea de adaptación para las distintas edades (4, 6, 7/8, 9/10 años). Esto siempre lo podréis adaptar en función de vuestros peques, pero nos parece genial dar esta ayuda a las familias y maestros. Se puede jugar de manera individual o por equipos. También cuenta con una breve explicación de cada una de las emociones junto a la misma ilustración que aparece en la carta y una pregunta sobre la que podemos reflexionar. Además, nos clasifica las emociones en 7 grupos distintos: felicidad,alegría, amor, ira, tristeza, miedo y sorpresa. Otra cosa que nos ha gustado mucho: no se hacen juicios de valor. No hay emociones positivas o negativas. ¡Simplemente emociones!


DINÁMICA DEL JUEGO

Es de lo más sencillo. Se coloca la baraja de cartas en lo alto de la mesa y hacia abajo. El primer jugador o equipo lanza el dado y sigue las instrucciones según lo que le indique. Si logra el objetivo se queda con la carta, la cual tiene una puntuación. En el caso contrario, la carta volverá a la baraja. Se sigue esta dinámica hasta agotar la baraja o agotar el tiempo estipulado. 

Las posibilidades del dado son: 
  • Inventa una historia.
  • Explica una situación
  • Adivina la emoción
  • Representa la emoción
  • Valora
  • Empatía




COMENTARIOS Y OPINIONES




Creemos que después de haber probado Emötiö hay mucho motivos por lo que lo consideramos un juego indispensable para trabajar la educación emocional. En primer lugar, es muy divertido. A los peques les ha encantado la representación de las cartas. ¡Incluso tienen sus favoritas!

Además, es muy sencillo de explicar y jugar. No hay grandes dificultades. Pueden jugar desde pequeños hasta mayores. Las partidas pueden ser muy interesantes y dar lugar a interesantes debates. 

Otro punto a favor es su tamaño. No es excesivamente grande. Yo lo llevo siempre en el bolso de las prácticas y de los viajes. No pesa mucho y se transporta fácil. Y la caja es lo más. Hemos tenido juegos que al meterlos en el bolso se abren. No tendréis ese problema. Es fantástica. 

Desde luego aquí ha sido todo un éxito. Ver como funciona con alumnos con TEA ha sido genial. Escogiendo y adaptando las emociones también puede ser un recurso excelente. 

¡Y los beneficios que le encontramos son muy variados! Les ayuda a tomar conciencia de sus propias emociones, a reflexionar, a empatizar con los compañeros. Es ideal para aprender a escuchar, respetar las opiniones y compartir las nuestras. También creemos que puede ser muy interesante para estimular el lenguaje ya que da para charlar largo rato. Uno de esos juegos para conocerse también, para disfrutar con los demás y seguir aprendiendo.

Nos despedimos hasta dentro de muy poquito. Muchos, muchos, muchos...